© F. Català-Roca
De Monique recuerdo su voz por telefono y de haber coincidido en el restaurante favorito de Cal Estevet. Monique fue una feliz irrupción de alegria para O. Maspons, X. Miserachs, L. Pomés y papà. Desconozco si concidió con Colita.
Tristemente sufrió un largo y doloroso cáncer y años más tarde tuvo el valor de venir a Barcelona para volver a despedirse de sus amigos catalanes. Lo hizó contenta con los que encontró. Mi padre ya no pudo estar.
Hay unas fotos muy bonitas de Monique en el archivo Català-Roca en las que està tocando un piano, duchándose y pintando los labios.
© MNAC / Foto O.Maspons